Museo de Arte Moderno / MAM Santo Domingo, República Dominicana.
Por: Gala Mayí-Miranda
Deseo fijar sobre papel las palabras, la citación, de Juan Mayí que da el tono de la exposición antológica y que también explica el por qué de mi propuesta de análisis: Juan Mayí nos dice en abril de 2022 “El arte como un arma para el desarrollo, como un derecho fundamental en el aprendizaje, en lo educativo; como una vía para el conocimiento”. Y creo que la frase sigue teniendo sentido, aún sea más restringido/limitado, si intercambiamos las palabras “el arte” por “la exposición Causas”. He tomado la frase como una invitación para considerar la exposición “Causas” como “una vía para el conocimiento” del mundo creativo de Juan Mayí y sus contextos que son la sociedad, la política, la educación y la economía dominicanas. Sí, ya Juan Mayí nos lo dijo anteriormente “Si el pinta como pinta es porque es Caribeño”; es un artista arraigado, aferrado a su isla / a su Caribe, un artista al que le duele su isla, principalmente su presente contemporáneo y su futuro.
El título de la exposición también es el título de las obras más recientes del artista, de su tercer (y ojalá no último) período artístico; detengámonos en ese nombre que eligió Juan Mayí como título de obras y de exposición: “Causas”. Silvio Rodríguez, cuyas música él escuchaba en su niñez a través de una de sus tías maternas que lo escuchaba y lo cantaba, bajito, pegado de su oreja, en una radio portátil casi a escondidas; estrenó en el año 1986 el disco “Causas y azares” que también es el título de una canción de su autoría. Y dice así: “Y las causas lo fueron cercando cotidianas, invisibles. Y el azar se le iba enredando. Poderoso, invencible. [...] Cuando acabe este verso que canto yo no sé, yo no sé, Madre mía si me espera uno. A paz o el espanto; si el ahora o si el todavía pues las causas me andan cercando cotidianas, invisibles y el azar se me viene enredando poderoso, invencible” ¿Existe el azar ? Lo que sí sabemos es que todo tiene causas. Todo. Todo tiene causas, incluyendo y específicamente esta exposición que inauguramos / recorremos y visitamos hoy. Causas poderosas. Concatenación de causas, concatenación poderosa. Una causa de esta exposición que deseo subrayar es la conservación y la preservación de las obras de los años 1980 así como de los brochures expositivos de la misma etapa por parte de Juan Mayí en este clima caribeño, húmedo y soleado. Esos versos de Silvio Rodríguez traen consigo también la reflexión del mañana, de la etapa que desarrollará a partir de ahora Juan Mayí en su taller. En cuanto a las obras que se titulan “Causas” y que forman parte de las 81 obras de arte de constituyen el cuerpo (el corpus coherente) de esta exposición, esas son las obras de madera de robles y de madera de caoba instaladas, dispuestas y/o puestas en suspensión con petróleo derramado, efectuadas en el 2020. Obras en las cuales el azar (prefiero utilizar el término de “espontaneidad” analizando la obra de Mayí, aunque la referencia de Silvio indicaría que sea “azar”) del derramamiento del petróleo, la espontaneidad de la disposición (im)precisa o precisa de las maderas, la forma espontánea/imprevisible en que se secarían y se secaron los colores azul y rojo sobre ellas: tienen cabida, o mejor dicho Juan Mayí les da cabida de forma consciente. Las obras tituladas “Causas” tienen un equilibrio per sé y un equilibrio en sus composiciones, buscadas y creadas por el artista, pero el protagonismo lo tienen las materias y la espontaneidad, o las materias y la parte de imprevisible. El acercamiento, la investigación y el trato de la materia de Jaun Mayí tiene cercanías con el trabajo de Miquel Bacelò, quien trabaja mucho la materia de la arena y los colores ocre y tierra. ¿Se han fijado en cuánto se parecen la disposición in-forma de las maderas en Causas I y Causas II con las mismas in-forma de la Serie “Memoria Sígnica”? Como si una fuera la proyección en tres dimensiones y la otra el modelo en dos dimensiones. Lo veo muy claro en la disposición de obras de esta exposición (cf. Nelson Ceballo).
Trayendo los versos de Silvio Rodríguez cercano a un texto sobre las obras de Mayí, abordó el tema de la intertextualidad en sus títulos o de las referencias literarias “escondidas” en los títulos de las obras de Mayí, lo cual es lo mismo. Los dibujos de 2019 titulados Mineral Negro I, II y III comparten nombre con el poema “Minerai noir” de René Depestre. En ese poema Depestre utiliza el recurso de la personificación atribuyéndole o reflejando el sentir del sufrimiento propio de seres vivos a la materia orgánica del petróleo. Utilizo el verbo reflejar ya que Depestre desliza en su poema la explotación del mineral negro/el petróleo por industrias mineras hacia la explotación de la mujer y del hombre negres. Depestre crea así pues una amalgama deseada por él, entre ambos sujetos hasta llegar a escribir algunos versos como: “una campana vaciada en la sonoridad de la sangre negra”, o “He aquí numerosos siglos que dura la extracción de las maravillas de esta raza”(negra). Cabe sacar a relucir acá, que Juan Mayí ha trabajado con el color oro: en tinta para dibujos, y en inserciones de piezas de metal color oro. El uso de la tinta oro en las obras que forman parte de esta exposición están acompañadas de perforaciones al papel. Esos dibujos son de 2010 y podemos considerarlos como un preludio investigativo al empleo de los recursos brutos como medio de expresión artística. El petróleo es probablemente una de las materias prima de la cual nuestras sociedades son las más dependientes: la necesitamos cotidianamente. Aún no ha sido sustituido por energías “limpias”, no contaminantes, de menos impacto nocivo para el medioambiente . A pesar de que nos dirigimos hacia ello, las proporciones están aún lejos de ser invertidas. El petróleo ha causado guerras recientes, ha provocado embargos internacionales, llevado a gobiernos ricos a la miseria y con ellos a su pueblo. El petróleo es un sujeto geopolítico, así como el oro. ¿No fue oro lo que saquearon los colones españoles en República Dominicana y en Abya Yala? Creo que si el petróleo de Mayí es el el asfalto de Soulages, es por esa alta connotación geopolítica.
Me pregunto ¿por qué le interpeló, le atrajo, el Surrealismo a Juan Mayí y no la práctica, la estética, el lenguaje sígnico de Fernand Léger (personas e interiores de industrias robustas) ? ¿o «los signos lingüísticos y el tratamiento plástico» (cf. Danilo de los Santos, p. 166) de Otto Dix durante la práctica del expresionismo alemán (deformaciones dramáticas de humanes para producir emociones fuertes en el espectador)? si también son artistas y movimientos artísticos definidos por el compromiso político y social, de izquierda. Uno de los aspectos que notamos en esta antológica es la atracción vital y creativa hacia la abstracción. En el catálogo de 1993 la exposición del XXV Festival de Cagnes-sur-Mer, leemos de la Sra. De Tolentino lo siguiente: «Aunque formado en la tradición de una academia neo-clásica, Juan Mayí nunca ha sido un figurativo convencional. Así no nos sorprende que se haya lanzado, con tanta convicción, en un abstraccionismo, a la vez radiante de energía, lírico y sin embargo sólidamente construido. Hay mucha fuerza en la pintura de Juan Mayí, lo que corresponde a su valentía, su generosidad, su temperamento poderoso». Esa convicción hacia la abstracción ha sido su constante. Cabe subrayar, hacer énfasis que ha sido una abstracción con gran trasfondo intelectual.
Dicho estas breves palabras de la preponderancia de las materias en las obras de Mayí presentes en la exposición, y centradas en sus obras del período recién inaugurado, le doy tiempo a detenerme en la importancia y el significado de la forma como medio de expresión. No lo analizo acá, pero Mayí integra lo matérico a sus cuadros/pinturas desde sus inicios en la pintura. Acá tenemos la obra 1492-Solojo en la cual crea forma, composición, textura, relieve y color con la soga cruda (fibras vegetales). En otras ha integrado la arena con Caparol y pigmentos, también ha creado composiciones, textura, relieve y color con cabello de su cabeza luego de un corte, hace muchos años (no diré cuántos). En cuanto a la forma, les teóricos de la estética y les artistas investigativos entre les cuales sitúo a Mayí, el punto clave está en si la forma pura puede ser significante y si la forma pura puede ser/es un arte válido, un “buen arte”. La forma pura en la estética visual es antónima de la mímesis. Con la obra Signos en territorio rojo (1990) y el período de Memoria Sígnica, Mayí alcanza en sus obras el hecho de captar y de transmitir el mensaje de las más puras formas. El doctor y catedrático barcelonés de Estética David Estrada Herrero escribe en su Estética de 1988 que “las formas puras suscitan la fruición estética” y por esa fruición, ese goce muy vivo que suscitan en nosotres espectadores sus formas sígnicas, debemos entender por un lado que Mayí tiene el dominio de la forma pura y por otro lado el protagonismo compartido de la materia y de la forma en su obra. Mayí tiene como ideal el entendimiento del Arte Informal, cuya corriente artística fue creada y liderada por Antoni Tàpies.
La obra Confesiones en la frontera es un momento, o mejor dicho un espacio, importantísimo de esta antológica. En abril de 2001, Juan Mayí escribió como prólogo de su poemario ilustrado Piedras del Ensueño “Ser pintor es ¿es ser poeta? Ser poeta ¿es ser pintor? Realmente no lo sé, pero sí estoy seguro que lo que busco en la poesía y en la pintura es expresarme, simplemente ¡expresarme!”. Nos traigo esta frase aquí y ahora para tratar de la práctica interdisciplinaria entre las artes. Juan Mayí vive, transita y ejerce entre las llamadas “artes visuales”, la escritura poética, la arquitectura, y hasta las artes escénicas (él). Confesiones en la frontera es una instalación con funcionalidad y utilidad arquitectónica, las rejas, la puertas de madera, los bloques de cemento están dispuestos de forma tal a dividir netamente espacios. La división entre personas humanas también está presente, de forma alusiva o metafórica con los cueros de tambor y maderas intervenidas. Las vitrinas en mesas-altas que exponen lo documental de Juan Mayí en esta exposición, fueron diseñados y fabricados por el artista en su taller junto con el herrero que le asiste fielmente desde hace casi 20 años, 18 para ser más precisa, y que está presente hoy acá con nosotres: Jorge Pérez. Los marcos de hierro patinado que enmarcan una parte de las obras expuesta acá hoy también, el marco de madera tallada y esculpida de “Series configuraciones” es un trabajo del mismo artista. Los zócalos o pedestales de madera noble pintados de blanco que reciben las obras “Causas”, por ejemplo, también fueron construidas por Juan Mayí. En Confesiones en la frontera tenemos por vez primera una frase completa autoría del artista hecha en metal por su asistente Jorge Pérez en el taller de Juan Mayí: “Yo no vivo en media isla, yo vivo en una isla”. Creo que Mayí se expresa efectivamente a través de las artes en plural y también creo que en Confesiones en la frontera él nos transmite/nos plasma/nos expresa/nos revela explícitamente cuáles son sus valores e ideales: el valor del compartir, el ideal de la democracia transparente y el del desarrollo, el valor de la igualdad y del respeto entre poblaciones caribeñas.
Cierro este texto así mismo como lo inicié, con la citación del artista que guió mi escritura: “El arte como un arma para el desarrollo, como un derecho fundamental en el aprendizaje, en lo educativo; como una vía para el conocimiento”.
*«Une cloche coulée dans la sonorité du sang noir [...] Voilà de nombreux siècles que dure l’extraction des merveilles de cette race» (extracto de Minerai noir, 1956)
de los Santos, D. (2007). Memoria de la pintura dominicana, tomo 8, 1980-1990: Continuidad de los lenguajes. Colección Centenario Grupo León: Santiago de los Caballeros.
Estrada Herrero, D. (1988). Estética. Editorial Herder: Barcelona.
Exhibition "Causes: four decades 1980-2020".
Juan Mayí / May 5 / July 2, 2022.
Museum of Modern Art of the Santo Domingo, Dominican Republic
By: Gala Mayí-Miranda
I want to fix on paper the words, the citation, of Juan Mayí that sets the tone for the anthological exhibition and that also explains the reason for my analysis proposal: Juan Mayí tells us in April 2022 “Art as a weapon for development, as a fundamental right in learning, in education; as a path to knowledge. And I think that the phrase still makes sense, even if it is more restricted/limited, if we exchange the words “art” for “the exhibition Causes”. I have taken the phrase as an invitation to consider the exhibition “Causas” as “a path to knowledge” of the creative world of Juan Mayí and its contexts that are Dominican society, politics, education and economy. Yes, Juan Mayí told us before “If he paints the way he paints it is because he is Caribbean”; he is a rooted artist, clinging to his island / his Karibe, an artist who is hurt by his island, mainly his contemporary present and his future.
The title of the exhibition is also the title of the artist's most recent works, from his third (and hopefully not his last) artistic period; Let's stop at that name that Juan Mayí chose as the title of his works and exhibition: “Causas”. Silvio Rodríguez, whose music he listened to in his childhood through one of his maternal aunts who listened to him and sang it, softly, glued to his ear, on a portable radio almost secretly; In 1986, he released the album “Causas y azares” which is also the title of a song he wrote. And he says this: “And the causes surrounded him daily, invisible. And chance was getting entangled. Powerful, invincible. [...] When I finish this verse that I sing I don't know, I don't know, my goodness, if one is waiting for me. To peace or terror; if the now or if the still, then the causes surround me everyday, invisible and chance comes entangling me powerful, invincible” Does chance exist? What we do know is that everything has causes. Everything. Everything has causes, including and specifically this exhibition that we inaugurate / tour and visit today. Powerful causes. Concatenation of causes, powerful concatenation. One cause of this exhibition that I wish to underline is the conservation and preservation of the works from the 1980s as well as the exhibition brochures from the same period by Juan Mayí in this humid and sunny Caribbean climate. Those verses by Silvio Rodríguez also bring with them the reflection of tomorrow, of the stage that Juan Mayí will develop from now on in his workshop. As for the works entitled "Causes" and that are part of the 81 works of art that make up the body (the coherent corpus) of this exhibition, those are the works of oak wood and mahogany wood installed, arranged and/or put into suspension with spilled oil, carried out in 2020. Works in which the chance (I prefer to use the term “spontaneity” when analyzing Mayí’s work, although Silvio’s reference would indicate that it is “chance”) of the spill oil, the spontaneity of the (im)precise or precise arrangement of the wood, the spontaneous/unpredictable way in which the blue and red colors would dry and did dry on them: they have a place, or rather Juan Mayí gives them a place conscious way. The works entitled "Causes" have a balance per se and a balance in his compositions, sought and created by the artist, but the leading role is the materials and spontaneity, or the materials and the unpredictable part. The approach, investigation and treatment of Jaun Mayí's material is close to the work of Miquel Bacelò, who works a lot with the material of sand and ocher and earth colors. Have you noticed how much the in-form arrangement of the woods in Causas I and Causas II resembles the same in-form in the “Signal Memory” Series? As if one were the projection in three dimensions and the other the model in two dimensions. I see it very clearly in the arrangement of works in this exhibition (cf. Nelson Ceballo).
Bringing Silvio Rodríguez's verses close to a text about Mayí's works, he addressed the issue of intertextuality in his titles or of the “hidden” literary references in the titles of Mayí's works, which is the same thing. . The 2019 drawings titled Mineral Negro I, II and III share a name with the poem “Minerai noir” by René Depestre. In that poem, Depestre uses the resource of personification, attributing or reflecting the feeling of suffering typical of living beings to the organic matter of oil. He used the verb to reflect since Depestre slides into his poem the exploitation of black mineral / oil by mining industries towards the exploitation of black men and women. Depestre thus creates an amalgam desired by him, between both subjects until he wrote some verses such as: "a bell emptied in the sonority of black blood", or "Here are many centuries that the extraction of the wonders of this race lasts" (black). It is worth mentioning here that Juan Mayí has worked with the color gold: in ink for drawings, and in inserts of gold-colored metal pieces. The use of gold ink in the works that are part of this exhibition are accompanied by perforations in the paper. Those drawings are from 2010 and we can consider them as an investigative prelude to the use of raw resources as a means of artistic expression. Oil is probably one of the raw materials on which our societies are the most dependent: we need it on a daily basis. It has not yet been replaced by “clean”, non-polluting energies, with less harmful impact on the environment. Although we are heading towards it, the proportions are still far from being reversed. Oil has caused recent wars, has caused international embargoes, led rich governments to misery and with them their people. Oil is a geopolitical subject, just like gold. Wasn't it gold that the Spanish settlers looted in the Dominican Republic and in Abya Yala? I think that if the Mayí oil is the Soulages asphalt, it is because of that high geopolitical connotation.
I wonder why Surrealism appealed to Juan Mayí and not the practice, the aesthetics, the sign language of Fernand Léger (people and interiors of robust industries)? Or Otto Dix's “linguistic signs and plastic treatment” (cf. Danilo de los Santos, p. 166) during the practice of German expressionism (dramatic deformations of humans to produce strong emotions in the viewer)? if they are also artists and artistic movements defined by political and social commitment, of the left. One of the aspects that we notice in this anthology is the vital and creative attraction towards abstraction. In the 1993 catalog for the exhibition of the XXV Cagnes-sur-Mer Festival, we read of Ms. De Tolentino the following: «Although trained in the tradition of a neo-classical academy, Juan Mayí has never been a conventional figurative artist. Thus we are not surprised that he has thrown himself, with such conviction, into an abstractionism, at once radiant with energy, lyrical and yet solidly constructed. There is a lot of strength in Juan Mayí's painting, which corresponds to his courage, his generosity, his powerful temperament». That conviction towards abstraction has been his constant. It is worth underlining, emphasizing that he has been an abstraction with a great intellectual background.
Having said these brief words about the preponderance of materials in the works of Mayí present in the exhibition, and focused on her works from the recently inaugurated period, I will give her time to dwell on the importance and meaning of form as a means of expression. I do not analyze it here, but Mayí integrates the material to his paintings / paintings from his beginnings in painting. Here we have the work 1492-Solojo in which he creates form, composition, texture, relief and color with raw rope (vegetable fibers). In others he has integrated sand with Caparol and pigments, he has also created compositions, texture, relief and color with hair from his head after a cut, many years ago (I won't say how many). As for form, aesthetic theorists and investigative artists, among whom I place Mayí, the key point is whether pure form can be significant and whether pure form can be/is a valid art, a "good art". art". Pure form in visual aesthetics is the antonym of mimesis. With the work Signs in Red Territory (1990) and the period of Memoria Signica, Mayí achieves in his works the fact of capturing and transmitting the message in the purest forms. The Barcelona doctor and professor of Aesthetics David Estrada Herrero writes in his Aesthetics of 1988 that "pure forms arouse aesthetic delight" and because of that delight, that very lively enjoyment that its symbolic forms arouse in us spectators, we must understand, on the one hand, that Mayí has mastery of pure form and, on the other hand, the shared role of matter and form in her work. Mayí's ideal is the understanding of Informal Art, whose artistic trend was created and led by Antoni Tàpies.
The work Confessions on the border is a moment, or rather a space, very important in this anthology. In April 2001, Juan Mayí wrote as a prologue to his illustrated collection of poems Piedras del Ensueño “Being a painter is, is it being a poet? Being a poet is being a painter? I really don't know, but I am sure that what I'm looking for in poetry and painting is to express myself, simply to express myself!”. I bring this phrase here and now to deal with the interdisciplinary practice between the arts. Juan Mayí lives, travels and exercises between the so-called “visual arts”, poetic writing, architecture, and even the performing arts (he). Confessions on the border is an installation with functionality and architectural utility, the bars, the wooden doors, the cement blocks are arranged in such a way as to clearly divide spaces. The division between human persons is also present, in an allusive or metaphorical way with the drum skins and intervened wood. The showcases on high tables that exhibit the documentary of Juan Mayí in this exhibition, were designed and manufactured by the artist in his workshop together with the blacksmith who has faithfully assisted him for almost 20 years, 18 to be more precise, and who is present here with us today: Jorge Pérez. The patinated iron frames that frame part of the works exhibited here today also, the carved and sculpted wooden frame of "Series configurations" is a work of the same artist. The noble wood plinths or pedestals painted white that receive the “Causas” works, for example, were also built by Juan Mayí. In Confessions on the border we have for the first time a complete sentence authored by the artist made in metal by his assistant Jorge Pérez in Juan Mayí's workshop: "I don't live on half an island, I live on an island." I believe that Mayí expresses herself effectively through the arts in the plural and I also believe that in Confessions on the border he transmits to us/forms us/expresses to us/reveals to us explicitly what his values and ideals are: the value of sharing, the ideal of transparent democracy and development, the value of equality and respect among Caribbean populations.
I close this text just as I started it, with the quote from the artist who guided my writing: “Art as a weapon for development, as a fundamental right in learning, in education; as a path to knowledge.
*«Une cloche coulée dans la sonorité du sang noir [...] Voilà de nombreux siècles que dure l’extraction des merveilles de cette race» (excerpt from Minerai noir, 1956)
de los Santos, D. (2007). Memory of Dominican painting, volume 8, 1980-1990: Continuity of languages. Grupo León Centennial Collection: Santiago de los Caballeros.
Estrada Herrero, D. (1988). Esthetic. Editorial Herder: Barcelona.
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