SORAYA ARACENA / THAÍS ESPAILLAT / FÁTIMA PORTORREAL / JULIA LUCRECIA TAVERAS / ROBERTO VALCÁRCEL
VISITAS GUIADAS
Dias: Sábados 14 y 21 de Agosto de 1:00 a 2:00 PM
FECHA LÍMITE DE INSCRIPCIÓN: 12 de Agosto en www.ccesd.org
AFORO MAXIMO: 15 Personas
OCA|News / Centro Cultural de España / Septiembre 4, 2021 / Santo Domingo, RD.
Lunes a sábados / Del 13 de agosto al 26 de septiembre de 2021 / 10:00 am a 6:00 pm
INTRODUCCIÓN
La exhibición El padre es de cristal la madre de oro surgió en el colmado Dumé, uno de los pocos que existen dentro de la verticalidad de Piantini, luego de la inauguración de una exhibición en una de las galerías “boutique” de la zona en marzo 2020. Les que estuvimos allí, Julianny Ariza Vólquez, Elisa Bergel Melo, Charlie Quezada y José Morbán, hablamos de la falta de exhibiciones colectivas fuera de las propuestas institucionales y de que la escena local se inclinaba a un individualismo dictado por el frágil mercado. Para ese entonces la pandemia era inminente y, a las pocas semanas, tuvimos que cuarentenar por lo que la conversación se quedó engavetada por un año. Cuando el Centro Cultural de España en Santo Domingo nos propuso hacer una exhibición lo obvio fue retomar la idea de la colectiva e incluir a Eliazar Ortiz para completar el quinteto. Dado que uno de los propósitos del CCE es la preservación del patrimonio material, inmaterial y natural, se nos hacía oportuno plantear revisiones sobre nuestra herencia, lo que representa y el contexto dónde se desarrolla, en busca de estrechar lazos con otras áreas del saber como son la arqueología, antropología, poesía y la escritura. Los textos recopilados aquí son el resultado de conversaciones sobre estos intereses con: Soraya Aracena, !aís Espaillat, Fátima Portorreal, Julia Lucrecia Taveras y Roberto Valcárcel Rojas, que re#exionan en torno a la significación del patrimonio desde su trabajo personal, con el $n de entablar un debate que se extienda más allá de las artes visuales. En Los Morbán y la estética de la historia, Aracena hace un recorrido por su relación longeva con Fernando Morbán, el abuelo de José Morbán, quien fue arqueólogo e investigador 3El padre es de cristal, la madre de oro del Museo del Hombre Dominicano. Espaillat cuestiona la relación entre patrimonio, patria y nación en el poema Yo no consentí a tener pasado. Portorreal, en su análisis Singularidades Juguetonas, describe los Tiguerites de Eliazar Ortiz construidos con pigmentos orgánicos, “espíritus creadores que habitan en cada palmo del asombro”. Taveras narra la experiencia de una niña durante el huracán Georges de 1998 en Huragán. Y, $nalmente, Valcárcel Rojas en Sobre cómo mirar y elegir nuestro pasado, revisa a través de la obra de Julianny Ariza Vólquez, el patrimonio dejado por los pueblos originarios de las Antillas después del proceso de colonización. Quisiéramos pensar que esta pequeña publicación servirá para enriquecer el mismo patrimonio del que surgieron las obras. Una forma de resistir el individualismo que dio lugar a las conversaciones iniciaron este proyecto así como el futuro incierto que tiñe nuestras historias.
La exhibición El padre es de cristal, la madre de oro invita a adentrarnos en los discursos críticos de los artistas que componen esta muestra en torno al patrimonio material y natural en el que se desarrollan. Todos ellos plantean el patrimonio como una herencia perteneciente a la comunidad, y, por tanto, no exenta de revisiones. Julianny Ariza Vólquez, Elisa Bergel Melo, José Morbán, Eliazar Ortiz y Charlie Quezada tratan, desde lenguajes contemporáneos, discursos no “oficiales” y abordan, desde una mirada retrospectiva, historias sin contar. Pretenden apelar a los lazos que se establecen desde la emoción, considerar nuestra experiencia con la naturaleza a través de la imaginación y cuestionar las posibilidades coercitivas del patrimonio desde lo institucional.
La exhibición cuenta con la participación de Soraya Aracena, Thaís Espaillat, Julia Lucrecia Taveras, Fátima Portorreal y Roberto Valcárcel Rojas como invitados de cada artista. Éstos colaboran con cinco textos que reflexionan en torno a la significación del patrimonio desde sus áreas de trabajo personal, con el fin de entablar un debate que se extiende más allá de las artes visuales y posiciona la temática de la exhibición desde perspectivas múltiples que se enriquecen entre sí.
The father is from Crystal the mother is from Gold / Collective exhibition
SORAYA ARACENA / THAÍS ESPAILLAT / FÁTIMA PORTORREAL / JULIA LUCRECIA TAVERAS / ROBERTO VALCÁRCEL
GUIDED VISITS
Days: Saturdays, August 14 and 21 from 1:00 to 2:00 PM
REGISTRATION DEADLINE: August 12 at www.ccesd.org
MAXIMUM CAPACITY: 15 People
Monday to Saturday / From August 13 to September 26, 2021 / 10:00 am to 6:00 pm
INTRODUCTION
The exhibition The father is made of glass the mother of gold emerged in the Dumé grocery store, one of the few that exist within the verticality of Piantini, after the inauguration of an exhibition in one of the “boutique” galleries in the area in March 2020. Those of us who were there, Julianny Ariza Vólquez, Elisa Bergel Melo, Charlie Quezada and José Morbán, we talked about the lack of group exhibitions outside of institutional proposals and that the local scene leaned towards an individualism dictated by the fragile market. By then the pandemic was imminent and, after a few weeks, we had to quarantine, so the conversation was shelved for a year. When the Cultural Center of Spain in Santo Domingo asked us to do an exhibition, the obvious thing was to take up the idea of the collective and include Eliazar Ortiz to complete the quintet. Given that one of the purposes of the CCE is the preservation of tangible, intangible and natural heritage, it was appropriate for us to propose revisions about our heritage, what it represents and the context where it is developed, in search of closer ties with other areas of knowledge such as they are archeology, anthropology, poetry and writing. The texts compiled here are the result of conversations about these interests with: Soraya Aracena,! Aís Espaillat, Fátima Portorreal, Julia Lucrecia Taveras and Roberto Valcárcel Rojas, who re # exion around the significance of heritage from their personal work, with the $ n to start a discussion that extends beyond the visual arts. In Los Morbán and the aesthetics of history, Aracena takes a journey through her long-standing relationship with Fernando Morbán, José Morbán's grandfather, who was an archaeologist and researcher 3The father is made of glass, the gold mother of the Museum of the Dominican Man . Espaillat questions the relationship between heritage, country and nation in the poem I did not consent to have a past. Portorreal, in her analysis of Playful Singularities, describes Eliazar Ortiz's Tiguerites built with organic pigments, "creative spirits that inhabit every inch of wonder." Taveras recounts the experience of a girl during Hurricane Georges in 1998 in Huragán. And finally, Valcárcel Rojas in On How to Look and Choose Our Past, reviews through the work of Julianny Ariza Vólquez, the heritage left by the indigenous peoples of the Antilles after the colonization process. We would like to think that this small publication will serve to enrich the same heritage from which the works arose. A way of resisting the individualism that gave rise to the conversations started this project as well as the uncertain future that colors our stories.
The exhibition The father is made of glass, the golden mother invites us to delve into the critical discourses of the artists that make up this exhibition about the material and natural heritage in which they develop. All of them pose the heritage as an inheritance belonging to the community, and, therefore, not exempt from reviews.
Julianny Ariza Vólquez, Elisa Bergel Melo, José Morbán, Eliazar Ortiz and Charlie Quezada deal with non-“official” discourses from contemporary languages and address, from a retrospective view, untold stories. They intend to appeal to the ties that are established from emotion, consider our experience with nature through imagination and question the coercive possibilities of heritage from the institutional point of view.
The exhibition has the participation of Soraya Aracena, Thaís Espaillat, Julia Lucrecia Taveras, Fátima Portorreal and Roberto Valcárcel Rojas as guests of each artist. They collaborate with five texts that reflect on the significance of heritage from their areas of personal work, in order to initiate a debate that extends beyond the visual arts and positions the theme of the exhibition from multiple perspectives that are enriched each.
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